A finales del siglo XX, y debido a la falta de espacio para realizar los enterramientos en los camposantos, en algunas ciudades se decidió enterrar bajo el suelo.
Es entonces cuando comienzan a formarse en algunos cementerios toda una red de impresionantes y tenebrosos túneles que recorrían el subsuelo de estos y cuya única iluminación por aquel entonces sería la de las claraboyas que daban a la parte del nivel del suelo y la tenue luz que pudieran aportar las velas o los candiles.
En 1885, se decide abrir el cementerio en el cual se localizan estos subterráneos. Una vez se descienden las escaleras de caracol que nos llevan hasta dichos pasadizos, el tiempo se detiene tanto para los vivos que decidimos allí entrar, como para los muertos que allí descansan, ya que dichas criptas se encuentran en un constante y avanzado estado de abandono desde comienzos de la década de los 80.
La humedad, junto a los colores verdosos del musgo convierten las por entonces relucientes lápidas blancas de mármol en paredes donde a veces es difícil distinguir el musgo de las cruces, grabados y fechas que allí se encuentran descritas.
Las estalactitas formadas en los bordes de unas claraboyas decadentes, así como también la luz y reflejos que estas crean en el interior, crean una sobrecogedora atmósfera difícil de olvidar para quienes la visiten. Las gotas de agua que caen sin cesar, van formando con el paso del tiempo un nuevo paisaje decadente y misterioso en el interior de estos subterráneos, produciendo que la humedad allí bajo vaya aumentando conforme se recorre aquellos pasillos.
Un lugar, que quienes tuvimos ocasión de visitarlo creo que nunca olvidaremos. Como siempre suele suceder, cuando se va con la verdad por delante, muchísimas veces incluso te abren lugares a los que de ninguna otra forma se podría acceder, y esto último es lo que sucede con este lugar, dejándonos incluso a nuestras anchas y bajo llave en el interior de aquellos sobrecogedores y lúgubres pasadizos.
Ahora ya tan solo me queda, recomendar la visualización de uno de los que posiblemente sean mis mejores vídeos en HD. Un recorrido en vídeo a través de aquellas impresionantes criptas. Espero que sea de vuestro agrado.
Es entonces cuando comienzan a formarse en algunos cementerios toda una red de impresionantes y tenebrosos túneles que recorrían el subsuelo de estos y cuya única iluminación por aquel entonces sería la de las claraboyas que daban a la parte del nivel del suelo y la tenue luz que pudieran aportar las velas o los candiles.
En 1885, se decide abrir el cementerio en el cual se localizan estos subterráneos. Una vez se descienden las escaleras de caracol que nos llevan hasta dichos pasadizos, el tiempo se detiene tanto para los vivos que decidimos allí entrar, como para los muertos que allí descansan, ya que dichas criptas se encuentran en un constante y avanzado estado de abandono desde comienzos de la década de los 80.
La humedad, junto a los colores verdosos del musgo convierten las por entonces relucientes lápidas blancas de mármol en paredes donde a veces es difícil distinguir el musgo de las cruces, grabados y fechas que allí se encuentran descritas.
Las estalactitas formadas en los bordes de unas claraboyas decadentes, así como también la luz y reflejos que estas crean en el interior, crean una sobrecogedora atmósfera difícil de olvidar para quienes la visiten. Las gotas de agua que caen sin cesar, van formando con el paso del tiempo un nuevo paisaje decadente y misterioso en el interior de estos subterráneos, produciendo que la humedad allí bajo vaya aumentando conforme se recorre aquellos pasillos.
Un lugar, que quienes tuvimos ocasión de visitarlo creo que nunca olvidaremos. Como siempre suele suceder, cuando se va con la verdad por delante, muchísimas veces incluso te abren lugares a los que de ninguna otra forma se podría acceder, y esto último es lo que sucede con este lugar, dejándonos incluso a nuestras anchas y bajo llave en el interior de aquellos sobrecogedores y lúgubres pasadizos.
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VIDEOREPORTAJE
REPORTAJE FOTOGRÁFICO
Es una pasada de video e imagénes ¿dónde está ubicado? Genial e impactante con una música que le va como anillo al dedo.
ResponderEliminarPolvo eres y en polvo te convertirás....impactante.
Besos
Impresionante entrada y sobrecogedoras imágenes. Enhorabuena por el trabajo, como siempre impresionante!
ResponderEliminarDiana
Patrimonio Industrial Arquitectónico
Vi tu comentario en mi blog, te dejo mi correo (por si no has visto el mail)
patrimindustrialarqco@hotmail.com
un saludo
Un lugar para recordar sin duda...
ResponderEliminarya sabes que al que fui yo era mas o menos como este, con lo cual supongo que deberias vivir las mismas emociones.
Felicidades por el report.
Dany
Hola!
ResponderEliminarFelicitaciones por la el artículo.
Un saludo.
¡Bonitas fotos!
ResponderEliminarVeo que el día que tú fuiste había bastante más luz o era más tarde. Nosotros fuimos en día nublado, después de haber llovido y sin trípode...
Un abrazo.
Hola Nacho, estupendo reportaje+fotos+video. Enhorabuena!Que lastima de sitio, tan desolador. Salu2.
ResponderEliminarImpresionante!!!
ResponderEliminarEnhorabuena por esta entrada...
Este es creo que el lugar más tenebroso que he visto jamás en un reportaje..
ResponderEliminarMis más sinceras felicitaciones por tu reportaje y fotos!!!
que hermosisimas fotos, en donde es? tus fotos se pueden comprar? me encantaría tener una, un saludo desde Colombia
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