Muchos autores, tales como James Stevens Curls o el actor escocés Billy Conolly citaron textualmente: " Glasgow es un poco como Nashville (estado de Tennessee, EEUU); No le importa mucho a los vivos, pero en cambio se preocupa por los muertos.
Y desde luego, que visitando este lugar, podemos hacernos la idea del culto hacia los muertos que tenian en esta ciudad. Tanto los restos de personajes ilustres como de gente menos importante que yacen en este lugar, tienen aquí impresionantes construcciones a modo de panteones y tumbas, las cuales son dignas de admirar y cuyo recorrido incita a un tranquilo paseo entre ellas.
Antes de pasar a observar el lugar detallado panteón por panteón y tumba por tumba (Siempre que sean conocidas), repasamos un poco la historia del lugar.
HISTORIA
En 1651, la colina es comprada por una poderosa agrupación de comerciantes de Glasgow. Tras la compra, se decide plantar una amplia cantidad de pinos y convertirlo en el parque llamado "Fir Park". Pero en 1831, esta junta de comerciantes, decide que esta tierra seria mas rentable utilizarla como la versión glasgowiana del cementerio Père Lachaise en París. Por tanto, Fir Park pasa a convertirse entonces en lo que hoy en día se conoce como la Necrópolis de Glasgow.
Durante los años transcurridos desde entonces, alrededor de 50.000 personas han sido sepultadas en la necrópolis, en alrededor de 3.500 tumbas que se extienden a cualquier capa hasta 14 metros bajo tierra y que, en la parte rocosa superior de la Necrópolis, tuvo que ser excavado con la ayuda de pólvora.
Los monumentos que encontramos en la necrópolis, muchos de ellos construidos a gran escala, son un tributo a la riqueza disponible en la época Victoriana de la ciudad.
El resultado es un museo al aire libre de las obras de la mayoría de los principales arquitectos de Escocia de la época, y los monumentos compiten por la atención con sus intrincados detalles y en muchos casos, gran tamaño.
En la segunda mitad de la década de 1800 se llegó a alcanzar un tamaño total de 37 acres o 15 hectáreas (por debajo de un tercio del tamaño del cementerio Père Lachaise).
En 1966 la Cámara de Comerciantes cede la Necrópolis al Ayuntamiento de Glasgow. El ayuntamiento procedió a limpiar la suciedad que rodeaba las tumbas y restos ornamentales.
Hoy en día la necrópolis es vigilada por los guardias, y la Necrópolis es un alto en la lista de lugares de interés a visitar en Glasgow, tanto como un objeto de interés por derecho propio, como por ser un gran lugar para disfrutar de las mejores vistas de la catedral y del resto de la ciudad.
Hay que recordar que los monumentos aquí colocados, estaban destinados a ser observados y apreciados: siempre intención la de que los visitantes tuvieran que ir allí para maravillarse ante el esplendor arquitectónico de los monumentos (y la riqueza de quienes pagaron por ellos).
La Necrópolis de Glasgow siempre tuvo la intención de ser un cementerio multi-confesional, y una de sus curiosidades es que mientras algunos de sus monumentos se relacionan con los enterramientos múltiples, otras están en la memoria de personas que ni si quiera están enterradas aquí en absoluto.
El ejemplo más llamativo de esta última categoría es el monumento más alto de la necrópolis, dedicado a John Knox.
Fue colocado aquí en 1825, cuando la zona era todavía un parque. Se trata de una columna inmensa coronada con una estatua de 12 pies de alto de John Knox. Para los ojos modernos el lugar es un poco irónico: Knox esta colocado hacia el oeste, con vistas a la Catedral de Glasgow, una de las pocas iglesias medievales en Escocia no destruidas durante la Reforma en la que Knox jugó un papel tan importante.
La entrada principal a la necrópolis se produce a través de unas puertas ornamentales que llevan el motivo de la Cámara de Comerciantes. Desde aquí un camino se abre paso hacia el cementerio y cruzando el denominado "Puente de los Suspiros", en alusión al Puente de los Suspiros de Venecia.
A principios del año 1800 los ladrones o "resurreccionistas", que robaban los cadáveres recien enterrados para su venta posterior a las escuelas de medicina, supusieron un grave problema en Escocia. Sin embargo, la Ley de Anatomía de 1832 se abrió una fuente legítima para el uso de los cadáveres para el estudio y las investigaciones médicas y por tanto el robo de cuerpos simplemente cesó, convirtiendose la Necrópolis en el cementerio que vemos hoy en día.
REPORTAJE FOTOGRÁFICO
Comenzamos con el plano general de la Necrópolis. El edificio mas grande en gris se trata de la catedral de Glasgow mientras que todo el entramado de caminos a su derecha, es la colina sobre la cual se situa esta ciudad de los muertos.
Dejando a nuestras espaldas la increible catedral gótica de Glasgow, nos adentramos por uno de los pequeños caminos observando ya las primeras tumbas.
Hacemos la primera parada en el camino tras toparnos con este impresionante e inmenso panteón; el monumento AITKEN.
Probablemente, sea el más grande de los mausoleos de roca gris de la Necrópolis. Consta de cuatro compartimentos, construido para las cuatro ramas de la familia.
Está diseñado en un estilo Greco-Renacentista, con 4 puertas de hierro forjado y un techo abovedado apoyado en 4 ejes de granito rosa.
Seguimos nuestro camino entre tumbas y más tumbas, algunas de ellas destrozadas.
Realizamos la segunda parada en la ruta ante este monumento. Diseñado por Charles Wilson en 1842. Encargado por el escritor Mathew Montgomerie, este monumento gótico fue erigido en memoria hacia su esposa Margaret, bajo coste de 400 £ .
Basado en la capilla de Henry VII en Westminster, el elaborado trabajo en piedra fue gravemente dañado por una tormenta el 6 y 7 de febrero de 1856.
Nos adentramos entre tumbas, tumbas y más tumbas...
...para realizar una tercera parada.
Este monumento, diseñado por William J. Bryce en 1834, rinde honor a McGavin, famoso por su publicación "Protestantes" la cual comenzó como una serie de cartas en la Crónica de Glasgow, en mayo de 1818. En estas, de un modo casi de locura, atacó religiosamente los errores del papado.
McGavin fue enterrado en la ahora demolida capilla de Wellington Street pero sus restos fueron re-enterrados en la Necrópolis.
El monumento mide 35 pies de alto y fue esculpido por el Sr. R. Forrest (quien también esculpió la estatua de John Knox.
Caminamos muy poco y encontramos otro gran monumento; el monumento a John Henry Alexander, diseñado por J. Hamilton en 1851.
John Henry fue un actor y a la vez propietario y gerente del Teatro Real en Dunlop Street - el único teatro dividido en dos secciones para que la comedia y la tragedia pudiese ser jugadas al mismo tiempo-. Una noche en 1849, 65 personas murieron en una aglomeración causada por que alguien gritó "fuego". El señor Alexander se dice que gritó a sí mismo tratando de evitar el desastre pero este ya nunca se recuperó de aquel palo, y murió poco después.
Se trata de un templo circular coronado en la parte superior. La sección delantera representa la parte de la tragedia y la parte de la comedia ambas completadas en la parte superior por una corona de laurel.
Seguimos caminando observando tumbas a nuestros lados...
... y nos volvemos a parar de nuevo en otro gran monumento.
El monumento al Reverendo Duncan MacFarlan.
Este señor, se convirtió en Director de la Universidad de Glasgow en 1823 y fue nombrado Ministro de la Catedral de Glasgow en 1824, puestos que ocupó durante más de treinta años hasta su muerte en 1857. Posteriormente pasó a ser decano de la Capilla Real entre 1820-1824 y dos veces fue elegido para ser moderador de la Asamblea General de la Iglesia de Escocia (en 1819 y 1843). También asistió a la colocación de la primera piedra del Puente de los Suspiros en 1833.
Murió en Glasgow el 25 de noviembre de 1857 y en su honor encontramos esta neo majestuosa torre gótica construida en 1863. Fue diseñada por JABell y el perfil de bronce esculpido por W. Brodie.
Seguimos dos paso más y próxima parada, el monumento a Charles Tennant.
Este hombre en 1797 descubrió sin experiencia previa en el asunto, que la mezcla de cloro y cal producia un agente blanqueador controlable.
En 1799 estableció su propia planta química la cual se convirtió en la mayor planta química de Europa. La chimenea de la fábrica, a una altura de 455 pies, fue un famoso monumento en Glasgow, conocido como 'Tennant Stack. Muchos de sus trabajadores sufrieron perforaciones en los tabiques nasales y ceguera debido a la continua exposición a productos químicos tóxicos, lo cual hoy en día se conoce coloquialmente como "Ratones blancos Tennant".
Charles Tennant murió repentinamente en su casa de Abercrombie Place en 1838 a los 71 años de edad. Artículos contemporaneos de prensa de la época criticaron este monumento esculpido en mármol, alegando que la figura de Tennant se desplomó "como una víctima de el producto que hizo su fortuna y la de su familia ".
Seguimos paseando dejando de lado algunos templos más...
... y llegamos al monumento a Charles Clark Mackirdy.
Este señor, era el dueño de una gran empresa de hilado de algodón. Sus padres habían tenido éxito entre los comerciantes con vastas propiedades en las Indias Occidentales.
Este es otro monumento basado en el popular diseño de Lysicrates con una rotonda de Corinto y con un inusual detalle de granito fino, además de que la puerta está en realizada en hierro fundido. El escultor de esta rotonda con finos detalles de Corinto fue David Buchanan.
Seguimos paseando entre esculturas fúnebres y algun que otro templo tan curioso como este que a mi personalmente me llamó la atención. Construido a modo de un templo griego.
Coronando toda la colina, nos topamos con el mayor monumento de toda la necrópolis en cuanto a altura se refiere; El monumento a John Nox.
Este imponente monumento de 70 metros - que comprende una columna dórica 58 pies de alto, rematada con una estatua de 12 pies de Knox en su vestido de Ginebra, sosteniendo una Biblia en la mano derecha - fue construido por James Carmichael en 1825.
El monumento es anterior a la impresionante necrópolis y al cementerio ya que fue originalmente concebido como el eje central del Fir Park.
La imagen obsesiva de John Knox con vistas a la catedral tiene profundas connotaciones religiosas y políticas y el monumento se ha convertido en una imagen icónica de Glasgow.
John Knox tomó las órdenes sagradas, mientras que asistía a la Universidad St Andrews. Más tarde se convirtió en discípulo de George Wishart, rechazando así a la Iglesia Católica Romana.
Knox tuvo que huir de Escocia a causa de la persecución religiosa y llegó a Ginebra, donde estudió y se convirtió a otra doctrina.Mas tarde, volvió a predicar en St Andrews y jugó un papel muy importante en la Reforma y sus consecuencias.
Con razón, y reconocido como una de las figuras más importantes en la historia de Escocia, Knox murió tranquilamente en Edimburgo el 24 de noviembre 1572 y sus restos fueron enterrados en St Giles Kirkyard.
La noche se nos va cayendo encima... pero hacia la salida nos topamos con el mausoleo mas grande que hemos visto en todo el recinto; El mausoleo de Archibald Douglas Monteath.
Supuestamente, Monteath hizo su fortuna cuando un elefante llevando piedras preciosas pertenecientes a un maharajá fue capturado y este se hizo con su carga. Cuando murió dejó 1000 £ para acabar de construir su monumento. Hubo déficit, pero sin embargo la Cámara de Comerciantes dotados del dinero adicional necesario acabó de construir este espectacular mausoleo.
Sobre la base de la Iglesia de los Caballeros Templarios del Santo Sepulcro, los expertos entran en controversias comentando si es el modelo de la Iglesia de Jerusalén o, posiblemente, de la iglesia de Cambridge. Mide 30 pies de diámetro y gira en torno a la puerta, teniendo cada ventana un diseño de nichos diferentes. En 1850 el hermano de Monteath , James Douglas Monteath de Rosehall y Stonebyres fallece y también es enterrado aquí.
Por último, y cogiendo el camino de salida, dejamos atrás este lúgubre pero impresionante reportaje.
Jorrr, me encantan estos lugares. Además por aquellas latitudes parece que el clima les da unos tintes todavía más tristes. No conocía este cementerio y me ha encantado el paseo.
ResponderEliminarEspectaculares las fotos¡¡ de diez. :)
Un abrazo
Muy interesante y respetuosa entrada,con unas fotografías fantásticas;nos gustaría tener tu autorización para enlazarla en "http://imatgesdesilenci.blogspot.com/ ",como Cementiri Glasgow en "es molt interesant".Gracias
ResponderEliminarHola Esther i Toni, teneis por mi parte la total aceptación para enlazarla a vuestro blog, saludos.
ResponderEliminarGracias,ya lo hemos hecho pues la verdad que es muy interesante y como dice Sinuhé,las fotos espectaculares.
ResponderEliminarUn abrazo
Me ha gustado mucho la entrada y me ha permitido contemplar lo que comenzamos pero que por causa de la lluvia no pudimos acabar de ver cuando estuvimos.
ResponderEliminarLa imaágenes: imresionantes.
Hola Nalabcer,
ResponderEliminarEn perVIVE.com, nos hemos interesado por el contenido que ofreces en tu blog y querríamos promocionarlo. Nos interesa esta ruta tan particular que haces sobre el cementerio de Glasgow.
La idea es extraer un breve texto de alguno de tus post o una fotografía y linkarte a tu blog.
Espero tu respuesta en el email de pervive@pervive.com
Enhorabuena!
Me ha encantado el reportaje, voy a ir a Escocia dentro de poco y una de las cosas que iré a ver será la catedral y la necrópolis.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho el detalle de poner la historia de ciertos personajes importantes.
Me acordaré de este blog y sus palabras cuando esté por allí ^^.
Voy a hecharle un ojo al resto de entradas, muchísimas gracias por la información y las fotos,que por cierto son preciosas.